Acapulco, Gro., 11 de octubre de 2021. Este martes concluye en la Universidad Americana de Acapulco (UAA), la etapa final del programa Servir para cambiar vidas, consistente en la entrega gratuita de 200 sillas de ruedas especiales a niños, adolescentes y jóvenes que padecen Parálisis Cerebral Infantil (PCI) y espina bífida, que tienen dificultades para caminar o trasladarse, y requieren de una silla de ruedas postural para facilitar su movilidad.

La actividad fue impulsada por la Fundación Hope Haven West, cuyo objetivo es “proporcionar dignidad a

través de la movilidad, a través de una amplia red de voluntarios, quienes invierten su tiempo y experiencia

para reunir los recursos materiales, financieros y humanos, para entregar sillas especiales a niños que las necesitan”.

Asimismo, con la participación de clubes rotarios de Acapulco y otros municipios de la entidad, pertenecientes al Distrito 4185; y estudiantes voluntarios de la UAA, de las carreras de Ciencias de la Salud; estudiantes habilitados como traductores inglés-español; y estudiantes de Comunicación y relaciones públicas.

Iván Maganda Vázquez, presidente del club Rotario Acapulco-Icacos, explicó que para llegar a esta semana, se llevó a cabo un proceso de localización, identificación de condiciones de salud y socioeconómicas de las personas que serían beneficiadas con las sillas.

Resaltó que cada silla está

diseñada a la medida de cada uno de los beneficiarios, considerando su complexión, el tamaño de sus piernas y

brazos, y la flexibilidad de su organismo.

Maganda Vázquez indicó que viajaron 11 especialistas provenientes de Estados Unidos, para adecuar las sillas a las necesidades de los beneficiarios, mediante una consulta de aproximadamente una hora que se efectúa en la UAA.

Señaló que la entrega de sillas se retrasó debido a la pandemia de Covid-19.

Mencionó que “cada caso especial, se requiere un tratamiento de 30 minutos para adecuar la silla a las necesidades y confort del paciente, su espina dorsal”, y precisó que cada silla tiene un valor de 10 a 60 mil pesos.

Manifestó que fueron beneficiados pacientes de todo Guerrero, de Altamirano, Tlapa, Costa Chica, Costa Grande, así como Acapulco.

Héctor Briseño