José de la Paz Pérez

El escenario político de este momento indica que para 2024 Morena volverá a alzarse con el triunfo en las elecciones federales en las cuales se habrá de elegir, entre otros cargos, nada más y nada menos que al nuevo presidente de la República, al sucesor de Andrés Manuel López obrador, casi nada.

Parece muy rápido para decirlo, sí, pero todo hace ver que el acomodo de fuerzas apunta hacia la izquierda y que la gran oposición que se había establecido en contra de Morena, comienza a desmoronarse.

El sismo político del 6 de junio provocó un reacomodo de fuerzas en todo México: el mapa político se recorrió hacia la izquierda bajo el nombre de Morena, no obstante que partidos políticos que se supone eran afines a esta corriente política se aliaron al PRI y, en general, a la derecha que decían combatir.

Sin embargo, las réplicas de ese sismo, concluidas con la toma de protesta a legisladores locales y federales, así como a gobernadores, están dejando más claro el panorama político rumbo a la elección de 2024 cuya carrera –de manera extraoficial- ya comenzó.

Y cuando muchos creían que se vendría una gran alianza entre la oposición en contra de Morena, comienzan a surgir voces de izquierdistas que se habían unido a la derecha, en el sentido de que están arrepentidos de ese amasiato, de ese desliz que no les dejó “ni para el jabón”.

Un PRD que estuvo a punto de perder su registro por hacer el “caldo gordo” al PRI, partido que en los momentos de definición le dejó sólo migajas, hoy recula y recobra la memoria: dice Evodio Velázquez, ex pre candidato de esa antinatural alianza, que su lugar está acá, en la izquierda.

En Guerrero, precisamente, varios personajes de distinto tamaño, particularmente del PRI, han manifestado su intención de colaborar con el gobierno de Evelyn Salgado Pineda, y qué bueno, porque ello significa que las aguas comienzan a calmarse y que no quedaron rencores del proceso electoral pasado.

El carácter conciliador e incluyente de la gobernadora abonó sin duda para que en Guerrero de momento haya paz política, al menos.

Si el PRI y el PRD terminan con su aventura, difícilmente habrá un gran frente en la derecha y, como van las cosas, el PRD estaría apostando su futuro a unirse a los partidos de izquierda que, sin lugar a dudas, liderará de momento Morena, el partido en el poder y de Andrés Manuel López Obrador, ni más ni menos.