Sergio Lugo

El 30 de abril es cumpleaños de la artista Ada Carasusan, bisnieta del escritor José Revueltas, quien falleció el 14 de abril de 1976. Mi amiga posee una de las voces más lindas de la actualidad; es capaz de crear una atmósfera con imágenes cercanas a los sueños, que cautivan.

En una charla hablamos de música. Se siente muy libre en esta nueva etapa de solista porque tiene menos filtros, la posibilidad de hablar por ella misma y materializar sus ideas de forma más fluida.

Se siente un poco identificada con el Art Pop, pues es un género que puede abarcar muchos tipos de sonoridades y estilos dentro del Pop, pero que por lo general tiene intenciones artísticas y propuestas que van más allá de solo la música.

Recientemente lanzó su primer sencillo, como solista, titulado Algo que no sabes, el video también ella lo realizó, sin presupuesto. Explica que se trata de una confesión de amor y deseo por la música, pero también habla del proceso que está viviendo en esta nueva etapa. Lo pueden ver en su página de Youtube, así como en sus redes sociales, que se llaman igual que ella.

Para Ada, la música es una especie de alquimia: una forma de transmutar emociones e ideas, un refugio y una forma de sanarse a sí misma. Me explica sus emociones al cantar: Siente la música y trata de volverse la emoción que la canción evoca, pero también siente una especie de liberación y conexión. Da un ejemplo: como cuando le cuentas a alguien querido lo que sientes o piensas, te comunicas y te sientes conectado con la otra persona.

Considera que hay una diferencia entre componer un poema y una canción: Cuando escribe poesía, siente quizá un poco más de libertad, pues no tiene ningún límite, y no tiene que adaptarse a nada en particular, más que a la vida propia del poema mismo. En cambio, al escribir una canción, debe pensar todo el tiempo en la relación de la letra con la música, en la métrica, en el ritmo de la melodía y la estructura. Además, de que el lenguaje de las canciones es un poco más directo y un poco menos rebuscado que el de la poesía. Ella siente que a veces las palabras pueden cambiar su significado dependiendo de lo que esté diciendo el contexto de la música.

Su tío bisabuelo fue Silvestre Revueltas, reflexiona que su música fue muy vanguardista y él es considerado como uno de compositores más originales que ha habido en México. Se atrevió a incluir instrumentos prehispánicos y sonoridades de la música tradicional mexicana dentro de la música de concierto, cosas que fueron sumamente innovadoras en su momento.

Ada con sus canciones no quiere convencer a la gente de nada. Aboga siempre por la libertad de pensamiento y la diversidad de universos mentales. Le gusta decir lo que siente, lo que piensa y lo que cree, pero, enfatiza: “de ahí cada quien es libre de tomar lo que le sirve o interpretarlo a su manera”, y está segura que, “eso es lo bello del arte, que no impone sino sugiere”.

Recientemente el gobierno federal convirtió a las Islas Marías en un centro cultural llamado Los Muros de agua, en honor a José Revueltas. Le pedí a Ada su opinión, le pareció bien, cree que hacen falta muchos espacios para la cultura y ese es un paso. Pues su bisabuelo estuvo preso dos veces ahí (cuando era una cárcel) por el hecho de haber alzado la voz y defender sus ideales, “por lo cual creo que es importante conmemorarlo en un lugar así, entre otras cosas, para recordar que la libertad de expresión es un tesoro del cual nadie debe ser privado”.

Precisamente sobre dicha novela, expresó: pienso que es una denuncia a las injusticias que él veía y que él mismo vivió en carne propia, por defender sus ideales. Precisamente el título hace referencia al lugar, pues se decía que en esa cárcel no hacían falta barrotes, ya que la misma agua del mar que rodeaba a las Islas era lo que los mantenía presos.

La voz de Ada es para mí como el canto de primavera, con golondrinas, flores amarillas, cuijas, y montañas que me susurran al oído.