Sergio Lugo

Elena Poniatowska cumplió 90 años el pasado 19 de mayo, es una cronista de la lucha social de México; como lo fue Carlos Monsiváis, quien el 4 de mayo hubiera cumplido 84 años. Y también otros connotados de la izquierda.

Nuestro querido Monsi, escribió junto con Jenaro Villamil la columna Por mi madre bohemios, en la revista Proceso, donde se burlaban de una manera satírica, sobre el lenguaje de los políticos, que a veces parecía diarrea en el caso de Vicente Fox.

Cariñoso de los gatos, tenía varios, con nombres graciosos como “miau zetung”. Contó que una vez estuvieron a punto de asaltarlo en el DF, pero el ladrón se percató de que era el escritor y lo perdonó. Carlos era un estupendo cronista de la Ciudad de México (que tanto quiero), de su gente, sus manifestaciones, de sus espacios emblemáticos como El Chopo, de la contracultura. Era crítico de cine.

Recomiendo su libro de crónicas Amor Perdido, (Era, México, 1977), título por una canción famosa, donde nos cuenta sobre estrellas de la vida nacional, de diversas clases políticas y sociales emanadas de la Revolución Mexicana (PRI), tan dispersas como Irma Serrano, Isela Vega, Agustín Lara, Alfaro Siqueiros, Salvador Novo.

Debo confesar que al leerlo tengo que tener un diccionario, debido a la riqueza de palabras que aderezaban sus reflexiones. Monsiváis, pacifista, le escribía los discursos que AMLO leía en el Zócalo. Visiten el museo de El Estanquillo dedicado a su obra.

El 19 de mayo fue cumpleaños de Elena Poniatowska, también escritora que nos ha contado muchos pasajes oscuros que el gobierno del PRI trató de ocultar, en otros artículos, ya he mencionado su libro Fuerte es el silencio, donde resalta a Rosario Ibarra; también cuenta la fundación de la colonia Rubén Jaramillo, en Morelos, por El Güero Medrano, de izquierda, de Guerrero.

Por cierto, el 23 de mayo de 1962, el líder agrarista Rubén Jaramillo fue asesinado junto con Epifanía, su esposa embarazada y sus otros tres hijos adoptivos (comunistas), cerca de Xochicalco, Morelos, por el Ejército, bajo las órdenes del presidente Adolfo López Mateos. Ese mandatario que se decía de “izquierda”. Así era el PRI, el partido del péndulo. Jaramillo luchaba por las tierras, inspirado en Zapata.

El libro más famoso de Elenita es La noche de Tlatelolco, el cual da voz a varios protagonistas, sobre todo, estudiantes, que vivieron la represión del Ejército, en la plaza de las Tres Culturas, que bajo las órdenes de Díaz Ordaz eran matar a los jóvenes en 1968. Siempre le voy a agradecer a Poniatowska que en 2018 me haya regalado su libro autografiado, y se tomara la molestia de enviármelo hasta mi casa, vía postal.

En 2015 la APPG en Chilpancingo, le otorgó la presea Sentimientos del Pueblo, ahí ella saludó a don Pablo Sandoval. Yo le regalé un brazalete en forma de mariposa que hizo mi papá, a partir de ahí me comunicaba con la escritora, vía correo electrónico.

En 2013, en un mitin de AMLO en el entonces DF, Poniatowska me autografió su libro El tren pasa primero, el cual narra la lucha y huelga del movimiento ferrocarrilero en 1958, en México. Para mí, este fue preámbulo de la 4T. Elena escribió que mi natal Taxco es precioso.

Igualmente, fue parteaguas de la democracia en los 50 el Movimiento Revolucionario de Magisterio, del que fue líder el profesor normalista Othón Salazar, nacido en Alcozauca, Guerrero, el 17 de mayo de 1924. Luchó por la democracia sindical, contra los charros, fue reprimido por el PRI. En 1987 fue presidente municipal de Alcozauca, en La Montaña roja, por el PSUM.

Otro libro de Poniatowska es Amanecer en el Zócalo, el cual relata los días del plantón (con el cual no estuvo de acuerdo Monsiváis) en el 2006, contra el fraude del PAN; promovido por parte de AMLO y sus seguidores. Ahí viví, en el campamento de Guerrero. Visiten su fundación en la CDMX.

 “Me gusta sentarme al sol, en medio de la gente, esa gente, en mi ciudad, en el centro de mi país, en el ombligo del mundo”: Poniatowska.