Linchamientos
Sergio Lugo
En las últimas semanas ha habido un linchamiento mediático en contra de López Obrador, aduciendo que él tiene nexos con el narcotráfico, sin embargo, nada se ha comprobado, es una desesperación de la derecha porque va en caída libre.
Raymundo Riva Palacio siempre escribe para tratar de encontrarle algún nexo al mandatario nacional, por ejemplo, en un tuit hizo parecer que AMLO está dejando que los grupos criminales se maten entre ellos, a lo que Felipe Calderón le escribió que era terrible.
Pero Calderón queda inmutado ante los señalamientos de fiscales de Estados Unidos, pues dijeron que tienen audios donde Genaro García Luna –preso en ese país por narcotráfico– donde amenazó e intentó sobornar a periodistas y matar a testigos. Nadie le cree al beodo de Calderón, cuando declara que no sabía de los nexos de su secretario de Seguridad Pública con la mafia, siendo él su jefe superior. También su subalterno Cárdenas Palomino está detenido en EUA.
Santiago Nieto denunció a Cabeza de Vaca por sus nexos con la delincuencia, y paradójicamente, el panista Roberto Gil Zuarth, señaló sin pruebas, a Nieto por sus nexos con el narco, Gil fue pareja, de la actual esposa de Nieto. Los panistas son cercanos a Calderón.
Por otro lado, hace poco más de un mes, la periodista Elisa Alanís publicó una entrevista con Anabel Hernández, quien iracunda declaró: “desde la presidencia de la República se está hostigando a los periodistas, se les está denostando, se está diciendo que los periodistas son enemigos del Presidente, evidentemente se está alentando, instigando a la violencia contra los periodistas… el propio Presidente López Obrador ha convertido a los periodistas en un tiro al blanco”.
Y hace poco volvió a arremeter contra el tabasqueño, dando a entender su supuesta relación con el narco, pero hasta el momento no ha presentado ninguna prueba, ni tampoco ninguna denuncia, todo queda en el chisme.
AMLO nunca he perseguido a los periodistas, estoy seguro que hasta exagera con su libertad de expresión, porque deja que lo insulten. Pero sí ha señalado a periodistas chayoteros, como Carlos Loret de Mola, quien hizo tele-montajes, con Genaro García Luna y la policía, en Televisa.
Otro caso es el de la comunicadora Lilly Téllez, que ahora es senadora del PAN, denostó al diputado Fernández Noroña, al llamarlo “Changoleón” (por un personaje de la calle), de manera burlona, y después, denunció que, a su asesor, lo amenazó un cartel, dando así a entender que el legislador por el PT y AMLO están con el narco. Téllez fascista les llama léperos a los de Morena.
Téllez siempre ha sido de esa forma, altanera y prepotente, el 7 de abril de 2000, trató de entrevistar a Hugo Vera, sub procurador del DF, entonces reportera de TV Azteca, escudándose de ser mujer, se portaba altiva; en ese mismo video, ella trata de entrevistar al procurador Samuel del Villar, en domingo por la noche, afuera de su casa, él se negó y ella insistió de manera grosera.
El 22 de junio de ese año, ella recibió varios disparos en su coche, resultando heridos su chofer y escoltas. Esa noche López Dóriga, de Televisa, la entrevistó, ambas televisoras dejaron entrever que el culpable era el gobierno del PRD de la capital. Otros, lo consideran “autoatentado”, para ganar rating.
El 7 de junio de 1999 fue asesinado el conductor de TV Azteca Paco Stanley; el procurador Samuel del Villar mencionó una venganza o ajuste del narco (se hablaba de Amado Carrillo). TV Azteca y Televisa unidas culparon a Cuauhtémoc Cárdenas, jefe de Gobierno del DF y pre candidato presidencial.
El conductor Jorge Garralda le pidió su renuncia, casi llorando, lo mismo que Alatorre. Convirtieron esa muerte en un drama nacional para atacar a la izquierda. Luego se supo que Stanley era alcohólico, y que portaba una credencial de la Secretaría de Gobernación, del gobierno de Zedillo, del PRI, para portar armas. TV Azteca impulsó la campaña “Vive sin drogas”.