Mayra Martínez Pineda

Es necesario entender términos como sexo y género para comprender por qué es necesario garantizar la paridad en la vida pública de este país.

Hoy quiero que se tomen un respiro de las redes sociales que ya tienen infinidad de clasificaciones sobre el género, que claro que son válidas, en un mundo que le apuesta a la inclusión, para partir del origen.

El término “sexo” se refiere a las diferencias biológicas entre hombres y mujeres,  mientras que el término “género” se refiere a las funciones y derechos definidos por la sociedad según seas hombre o mujer, y de acuerdo a una expectativa de lo que se cree es para uno u otro género.

Mientras que las diferencias de sexo no cambian con el tiempo, las diferencias de género sí lo hacen, a medida que las sociedades evolucionan, obtienen más conocimientos y se desarrollan.

Las diferencias de género están relacionadas con las diferencias de sexo, en el sentido que las diferencias biológicas otorgan un patrón de conducta, por ejemplo la diferencia de fuerza física, colocó históricamente a la mujer en una situación de inferioridad física y de menor poder en las sociedades primitivas, lo que generó la discriminación de género hasta llegar a la división de poderes.

Hay pruebas de que las sociedades primitivas todo lo compartían, la poligamia era común, sin embargo, para asegurar a los hijos como propiedad para garantizar tener mayor número de ganancias en cosecha y caza, los hombres decidieron apropiarse de una sola mujer, condiciona a garantizar procrear sin participar de actividades que implicaran fuerza. Al menos eso han documentado algunos especialistas.

El sexo entonces se relaciona con los caracteres sexuales, principalmente, hay una razón biológica para ser hombre o mujer.

El género finalmente es un constructo social, de cómo se debe ser hombre o mujer, qué se considera apto para cada género y ha ido muy ligado a creencias, por ello es que cada época es tan cambiante.

Ahora hay otra situación que ha rebasado estas primeras clasificaciones de las personas, y ahora se habla de la identidad de género, que lo relacionan sobre la manera de cómo una persona se sienta o se perciba a sí misma, y entonces decida en qué género quiera ser considerada.

Tipos de identidad de género

– Cisgénero. Son aquellas personas que tienen una identidad de género que coincide con la que se les asignó al nacer.

– Transgénero.

– Transexuales.

– Tercer género o no-binarios

La polémica surge a raíz de la edad en las personas que pueda considerarse madura para definirse en cualquiera de las clasificaciones mencionadas, y la libertad incluso de cambiar de percepción sobre sí misma en cualquier momento.

Es preocupante en la medida en la que hay diversidad de ideas, y es casi imposible en esos temas llegar a acuerdos. Hay ideas conservadoras, sexistas, libertarias, pero hay verdades científicas y esos criterios son mucho más afables.

El punto que yo deseo hacer visible es que las diferencias de sexo, dieron lugar a las diferencias de género, estereotiparon y abrieron grandes brechas de desigualdades entre hombres y mujeres; las mujeres quedamos ancladas de origen a muchas desventajas.

Movimientos feministas, acuerdos internacionales, leyes y acciones afirmativas, la mayor resistencia para eliminar las discriminaciones impuestas al género femenino vienen del constructo social, y de las resistencias a pensar distinto sobre las mujeres y los lugares que debemos ocupar en los espacios públicos de toda índole.

El tema de procurar la paridad ayuda mucho, pero el origen del problema es cómo pensamos los sexismos interiorizados, y lo importante es eliminar estas ideas para que las mujeres y las niñas, el género femenino, avance igual que el masculino, que a la fecha es que logra mayores ventajas y esto tiene un sello especial, la calidad de vida que puede tener una persona, según su género.

* Maestra en prevención de violencia de género por la Universidad de Salamanca, España