La FGE, Profepa y la Contraloría General del Estado investigan el caso

Darío Lagunas

Ángel Almazán Juárez, actual Secretario del Medio Ambiente y Recursos Naturales en Guerrero (Semaren), informó que en torno a la presunta desaparición de algunos ejemplares de Zoochilpan, podría haber sanciones penales en contra de quien resulte responsable por la presunta desaparición de algunos ejemplares que se encontraban a resguardo en este sitio.

El titular de esta secretaría, dijo que hay varias dependencias realizando investigaciones a efecto de aclarar lo conducente, entre las que se encuentran la Fiscalía General del Estado de Guerrero, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente e incluso la Contraloría General del Estado, a fin de determinar en quién deberá recaer la responsabilidad en supuesto de comprobar mediante un censo, la desaparición o extracción de alguna de las especies del zoológico Zoochilpan.

Cuestionado sobre la cantidad de especies que extraoficialmente se cree que fueron extraídas de este lugar, puntualizó que se maneja la cantidad de cuatro ejemplares de watuzi y una cebra, aunque reveló que hay otros animales menores que también no aparecen, entre ellos, algunos ejemplares de borregos de berberia, para lo cual se está cotejando las especies que permanecen en Zoochilpan con el inventario oficial que maneja la Semaren.

Ángel Almazán Juárez, manifestó que se va a verificar toda la información disponible a efecto de no dar información falsa o tergiversada a los medios de comunicación, para no dar motivo a que se malentienda la situación con la desaparición de estos animales.

Aclaró que, en su momento, la Semaren, de la cual depende el Zoológico, no fue notificada de los cambios o movimientos de estas especies, procedimiento al que debe estar sujeto el director que en su momento fuese responsable, para mantener enterada a la Secretaría de lo que pretenda hacer.

Finalmente, el funcionario subrayó que desde el pasado viernes inició un censo de los animales que están en cautiverio en Zoochilpan, para cotejar con el inventario que se tiene para conocer a ciencia cierta cuántos animales están en el zoológico y cuántos faltan, para deslindar responsabilidades.