Su participación fue para defender a la democracia, no al INE, dice el ex candidato

Dassaev Téllez Adame

El ex candidato a gobernador por la coalición PRI, PRD y PAN, Mario Moreno Arcos, se deslindó de haber organizado la marcha en contra del Plan B de la Reforma Electoral impulsada por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.

Puntualizó que acudió como un ciudadano más a defender la democracia, no al Instituto Nacional Electoral (INE), acusó que en el proceso electoral pasado se les cayó el sistema lo que arrojó un número menor de votos.

“Yo no defiendo mucho al INE, el proceso pasado participé como candidato a gobernador y se les cayó el sistema, obviamente fue un hecho del mismo gobierno federal, amañado y amafiado”, recriminó.

Luego dijo que el INE ha permitido tener elecciones libres y que incluso el gobierno actual que encabeza el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, llegó al poder gracias a que el INE cuando era un órgano fuerte.

Moreno Arcos descartó el acarreo de ciudadanos para participar en la marcha que partió de la alameda Granados Maldonado y culminó en la plazuela Unidos por Guerrero.

“Como pueden ver no hay combis, no hay acarreo”, puntualizó y advirtió que el Plan B de la reforma no avanzará y mucho menos se consolidará. “Se va a encontrar con una enorme barrera en la Corte el Plan B de este partido y el gobierno que intenta perpetuarse en el poder”.

Informó que junto al ex gobernador Héctor Astudillo Flores han comenzado un movimiento político para recuperar Chilpancingo y Guerrero, e indicó que hay voces ciudadanas que no están de acuerdo con las políticas públicas que implementan Morena y consideró que del actual gobierno estatal solo hay “políticas fallidas donde no hay avances ni desarrollo”.

Dijo que él y su partido han sido prudentes, dando oportunidad a que la actual administración estatal trabaje, y ellos no se han dedicado a denostar o criticar, pero aseguró que ya es momento de alzar la voz de que no están de acuerdo que Guerrero vuelva ser el número seis como el estado más violento en el país y, el segundo estado con el mayor número de pobres.

Dijo que él y Héctor Astudillo han tenido un primer encuentro para generar acuerdos y consensos en la ruta de trabajar para el 2024 y recuperar la alcaldía de Chilpancingo, ya que no están de acuerdo lo que sucede en esta ciudad, donde hay inseguridad, no tiene agua y hacen falta servicios públicos.