“Todas las vidas cuentan, cárcel para el agresor”, clamaron en cartulinas

Rosalba Ramírez

Un grupo de ciudadanos se manifestó en el Asta Bandera en solidaridad con Stich, el perrito callejero que murió el lunes 1º de mayo, luego de cuatro días de luchar en agonía por su vida tras ser golpeado brutalmente por tener hambre y robar alimento de una panadería.

A gritos de “todas las vidas cuentan”, “justicia para Stich” y “cárcel para el agresor”, unos 20 ciudadanos se concentraron con cartulinas en mano y desde la avenida Costera del puerto de Acapulco, se unieron a la exigencia de justicia que ciudadanos emprendieron desde el domingo pasado en Chilpancingo, municipio en donde ocurrió la agresión.

Este domingo a las 7 de la mañana, ciudadanos como Leslie Espinobarros, quien es integrante de los colectivos Patitas Felices, Colitas Costeña y Greenpeace, opinó que en Acapulco, por ejemplo, con el asesinato violento de Stich, no se cuenta con un refugio para perros callejeros ni una campaña de esterilización para disminuir el número de perros en situación de calle.

Además, consideró que ante el temor de la ciudadana que adoptó a Stich por una posible represalia de los dueños de la panadería tras interponer una denuncia ante la Fiscalía de Guerrero, debiera existir un área de protección para el denunciante a fin de salvaguardar su vida.

Otra de las manifestantes llamó a preservar y cuidar la vida de todos y pidió aplicar la ley para el responsable de la agresión física contra Stich.

Finalmente, criticó que pese a que existen varios partidos políticos, estos poco o nada proponen a favor del bienestar animal.

“No se vale que por un bolillo gente inhumana lo matara. Hay personas que lo único que reflejan es la falta de amor propio y al prójimo, porque un bolillo o un canasto de bolillos lo puedes pagar, pero un perrito de la calle indefenso, no”.