Concluye sin éxito la jornada de búsqueda de personas desaparecidas en Chilpancingo
Agentes de la FGE no los dejaron entrar a Petaquillas, señaló una madre
Dassaev Téllez
La jornada de búsqueda en diferentes puntos de la ciudad de Chilpancingo, culminó sin resultados positivos; inició el pasado lunes en el cerro del Parador del Marqués con ocho madres buscadoras provenientes del puerto de Acapulco, sin embargo, al enterarse de las actividades del colectivo, siete madres, esposas y hermanas de víctimas de desaparición forzada se sumaron a los trabajos en campo.
Para este último día de búsqueda, Mujeres de Chilpancingo que tienen Hijos, Esposos o Hermanos Desaparecidos se sumaron a la jornada de búsqueda impulsada por el colectivo Verdad, Memoria y Justicia Acapulco-Chilpancingo.
Denunciaron que autoridades ministeriales y militares no les permitieron ingresar a la comunidad de Petaquillas, ya que no tenían permiso del grupo criminal Los Ardillos para pegar fichas de búsqueda de víctimas de desaparición forzada como parte de las actividades de la semana de búsqueda que dio inicio el pasado lunes en la ciudad capital.
En el quinto y último día de búsqueda de fosas clandestinas, las madres buscadoras subieron a la colonia Nueva Esperanza y al conocido Cerrito Rico, puntos ubicados en la parte Norte y Nororiente de la capital del estado de Guerrero, donde se tiene un acceso complicado porque solo hay caminos de terracería.
Durante 5 días, con palas, picos y varillas a cuestas, recorrieron el cerro buscando puntos de tierra removida, pues así identifican las fosas clandestinas, una vez que detectan algún punto entierran la varilla y algunos perros que llevaron la huelen para detectar algún olor de restos óseos, o hallar alguna osamenta.
Estuvieron resguardadas por una patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSP), apoyadas por la unidad canina de la Fiscalía General del Estado (FGE) e integrantes de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas (CEBP), así como de personal del Ejército Mexicano, quienes se encargaban de resguardar las zonas que visitaron.
El lunes, alrededor de ocho madres buscaron en el cerro del Parador del Marqués, al sur de Chilpancingo. El martes recorrieron la comunidad de Tlamicoya, del mismo municipio de Chilpancingo. El miércoles estuvieron en las inmediaciones del Cerrito Rico, la jornada del jueves en Villas Magisteriales y la colonia PRD parte alta. Tenían contemplado ingresar a la localidad de Petaquillas, pero las autoridades no se los permitieron, supuestamente porque no contaban con el permiso del cártel de Los Ardillos.
Al intentar ingresar a la comunidad de Petaquillas, la Fiscalía General del Estado (FGE) se comunicó con una integrante de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas (CEBP) para decirle que no tenían el permiso del cartel de Los Ardillos, para ingresar. “No, nos dejaron entrar que porque teníamos que pedirle permiso al cartel de Los Ardillos, la Fiscalía dijo que no entráramos, que no tenían el permiso, sí me dio coraje que le tengamos que pedir permiso a una banda, o un grupo delictivo porque ni ellos que se supone son la autoridad pueden entrar”, lamentó una de las madres buscadoras, quien omitió su nombre por temor a represalias.
Socorro Gil Guzmán, representante del colectivo, lamentó que no tuvieran resultados positivos en la jornada de búsqueda, pero aseguró que la unión de más mujeres en búsqueda de sus desaparecidos deja en claro la crisis que existe en la entidad de desaparición forzada de personas. Lamentó el ambiente de inseguridad que prevalece en la capital, lo que entorpeció los trabajos programados.
Otra madre que busca a su hijo, relató que el miércoles tuvieron que suspender la búsqueda en campo, debido al enfrentamiento que se suscitó en el municipio de Eduardo Neri, en donde dos policías estatales, un municipal y un civil fueron abatidos.