Rechaza petición de que continúe en el cargo; soy partidario de la no reelección 

Antonio Hernández Peralta y Rosalba Ramírez 

El presidente Andrés Manuel López Obrador, de gira por Ciudad Altamirano, en la región de la Tierra Caliente de Guerrero, llamó a enfrentar entre todos el tráfico de drogas y sus consecuencias. Desde esta región hizo una breve alusión al enfrentamiento ocurrido la víspera en Texcaltitlán, Estado de México: “Hay que cuidar mucho que no haya consumo de droga, porque tenemos que combatir el narcotráfico y esto que está pasando antier en el Estado de México, el llamado cobro de piso. Todo eso lo tenemos que combatir, pero entre todos”. Más tarde encabezó una nueva concentración en Tejupilco, Estado de México, (en medio de un inusual despliegue del Ejército para proporcionar seguridad), un poblado ubicado a poco más de 40 kilómetros de Texcaltitlán, donde fallecieron 14 personas. Al término del encuentro, a bordo de su camioneta y entre la gente que se arremolinaba en torno a él, dijo que ya está allá la Guardia Nacional. Desde la Unidad Deportiva de Ciudad Altamirano, el presidente López Obrador manifestó: “No se preocupen porque habrá continuidad, ya no voy a estar yo porque estoy cerrando mi ciclo, además hay relevo generacional”, en referencia a dos temas: qué va a pasar con los programas sociales dirigidos a adultos mayores, estudiantes, discapacitados, madres solteras, y Claudia Sheinbaum Pardo, candidata del partido Morena para sustituirlo en ese cargo. El mandatario federal dijo que no hay una comunidad de Guerrero o de México que por lo menos llegue una ayuda en beneficio de la gente. “Hasta en los pueblos más apartados”. “Soy partidario del sufragio efectivo no reelección, (…) se piensa que un líder es indispensable, nada en encariñarse demasiado, no hay que tenerle mucho apego ni al poder ni al dinero, además, hay relevo generacional, y estamos contentos porque va a crecer nuestra transformación, ya sentamos las bases para la transformación y va a estar muy difícil que haya retroceso, no va a haber marcha atrás”. Desde el municipio de Pungarabato, de la región de Tierra Caliente, el Presidente de México reiteró que antes de que termine su sexenio quedará estipulado que los programas de Bienestar tendrán un rango constitucional para que quien llegue al poder no pueda eliminar dichos beneficios económicos. “El pueblo se va a hacer cargo de hacer valer la Constitución. Les comento para los que se preocupan. Va a ser mejor. Vamos a seguir apoyando en el caso de Guerrero. Da mucho gusto que nadie padezca y por lo menos tenga para los alimentos”. También se comprometió a que antes de que termine su mandato, 250 mil viviendas edificadas en el puerto de Acapulco, serán reconstruidas y mejoradas. “No crédito, apoyo (directo) para la gente damnificada. Se acabó la robadera, por eso están enojados. ¿Saben qué pasaba?, se quedaban con el dinero del pueblo, privatizaron bancos, minas, aeropuertos, ni una sola concesión se ha entregado de explotación de petróleo, nada. Vamos a rescatar a la Comisión Federal de Electricidad. Ahora alcanza el presupuesto porque no hay corrupción”. Antes de finalizar su discurso, López Obrador pidió cuidar el núcleo familiar, sobre todo a la juventud de las drogas. Dijo que Estados Unidos enfrenta un grave problema de salud por el consumo de la droga conocida como fentanilo, que deja 100 mil muertes anuales. Consideró que disminuir el consumo de drogas puede ayudar a combatir el narcotráfico y la extorsión, así como el cobro de piso. “Lo que pasa en Estados Unidos es una pandemia; no pasan de seis meses (para que fallezca el consumidor de fentanilo). Tenemos que cuidar a nuestros hijos, no nos avergoncemos de nuestros sombreros, de nuestras costumbres, de nuestra identidad cultural”, finalizó.