Isidro Bautista Soriano 

Si se tuviera que hacer una valoración, a simple vista, del posicionamiento político de Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, por la culminación del año, seguramente se llegaría a la conclusión de que, en términos generales, se han mantenido casi en la misma puntuación, sin haber subido y sin haber bajado, tanto a nivel nacional como a nivel Guerrero. La morenista sigue arriba alrededor de 20 puntos, con la observación de que prácticamente ha estado desde hace determinados meses en la ruta hacia el 2024, no obstante el cargo que desempeñada de jefa de Gobierno de la Ciudad de México. La actual senadora con goce de licencia es la que le ha seguido hasta el momento, a pesar de que entró a la competencia hace aproximadamente seis meses. El miércoles 13 de diciembre, el diario La Crónica de Hoy de la Ciudad de México se convirtió en el medio más reciente en difundir encuesta al respecto, elaborada en la capital del país para sus lectores por la empresa Indemerc. En las proyecciones electorales para la Presidencia de la República, Claudia Sheinbaum tiene una ventaja todavía mayor en la ciudad que gobernó. En la intención de voto bruta, aventaja a Xóchitl Gálvez 52 por ciento contra 33. En la intención neta (eliminando indecisos y abstencionistas), la diferencia supera los 20 puntos porcentuales: 59 por ciento contra 38, según publicó dicho rotativo. Está claro que el hecho de que Samuel García haya dejado su precandidatura, afecta las posibilidades de Movimiento Ciudadano. Al momento, el candidato genérico, sin nombre, del partido naranja, obtendría sólo 2 por ciento de los votos de los capitalinos (3 por ciento, en la medición neta). Falta ver qué efecto tiene entre los electores el candidato de MC, ya con nombre y apellidos, señaló el periódico. La encuesta, precisó, fue realizada entre el 7 y el 10 de diciembre, mediante el método CATI, y se aplicó a mil 70 personas con base en sexo, grupos de edad y nivel socioeconómico. La estabilidad con que han mantenido su preferencia sin mayor movimiento quizá se deba al hecho de que estas fases, incluida la precampaña que terminará en la primera semana de 2024, han sido más bien para el calentamiento de motores, como ya en alguna ocasión aquí lo comentamos. La batalla, como históricamente ha solido ser, con el mes de enero subirá de tono de manera gradual, e irá adelante la que se cubra en todos los frentes, sin el descuido de ninguno. En total estarán en disputa 20 mil 375 cargos a nivel federal y local, por lo que también en parte dependerán de las caras que salgan como candidatos y candidatas, incluidos los de las gubernaturas de ocho entidades y la Jefatura de Gobierno, puesto que los electores observarán a quienes las rodeen en su proselitismo. En el caso de Guerrero, por ejemplo, podría uno preguntarse que cómo afectaría o favorecería que en cierta coalición de los partidos una mujer encabece la fórmula de candidatos al Senado, y en otra sea un hombre, si no tiene el nivel de competitividad que su acompañante. Y faltarían los abanderados postulados a las demás posiciones, así como la posible postulación de candidatos independientes presidenciales y de Movimiento Ciudadano, tras la caída de su precandidato Samuel García.