Ejidatarios de Tenexpa llevan a cabo un programa de reforestación en más de 700 hectáreas de manglares
El proyecto de la siembra de vegetación fue aprobado y es financiado por Conafor
Rodolfo Valadez
Miembros del ejido de Tenexpa pusieron en marcha un programa de reforestación de manglares en una extensión de más de 700 hectáreas en el estero de Boca Chica y Michigan, con el objetivo de reforzar esa vegetación, la cual ha sido fuertemente afectada por los escurrimientos de productos químicos usados por los agricultores en la siembra de mango, plátano y coco, así como la tala de terrenos para convertirlos en potreros por parte de los ganaderos locales. De acuerdo con la comisaria ejidal de Tenexpa, Juana Guerrero Vargas, el proyecto para la plantación de manglares fue aprobado y es financiado por la Comisión Nacional Forestal (Conafor), la cual ya entregó a los ejidatarios los primeros 2 millones 688 mil pesos, de los 7.5 millones de pesos totales, a emplearse en cinco años. En entrevista, indicó que en su primera etapa, el proyecto contempla el cultivo de 5 mil plantas de manglar en un terreno de 100 hectáreas ubicado en una zona cerca de la laguna destinado particularmente para las tareas del proyecto, mismo que contempla la siembra de 91 mil plantas por año. Guerrero Vargas dijo que el manglar en la laguna ha sufrido daños importantes provocados por los escurrimientos de los desechos químicos de los productos que usan los agricultores para el cultivo de mango, coco, papaya y plátano, además de que los ganaderos también han talado una gran extensión del manglar para crear potreros y por eso es necesario reforestar y reforzar el manglar porque su existencia es vital para el ecosistema de la zona y la región pues constituye una barrera natural en contra de los fenómenos meteorológicos, además de que funciona como filtro natural para mantener limpias las lagunas y esteros. La comisaria abundó que los ejidatarios comenzaron los trabajos desde el pasado 13 de enero, para lo cual han hecho recorridos por el cuerpo de agua acompañados por técnicos de Conafor, quienes además de asesorar a los ejidatarios supervisan que los recursos se apliquen de acuerdo con el proyecto aprobado por la dependencia federal.