Júbilo y patriotismo desbordan el Zócalo de la CDMX por el último Grito de AMLO
La multitud lo recibió coreando “es un honor estar con Obrador”
Antonio Hernández Peralta
El último Grito de Independencia encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador fue una despedida cargada de simbolismo y emociones. A las 11 de la noche, como dicta la tradición, López Obrador apareció en el balcón central del Palacio Nacional acompañado de su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller. La multitud en el Zócalo, que había esperado por horas, lo recibió con júbilo, coreando “¡Es un honor, estar con Obrador!” y “¡Presidente, Presidente!”. El Zócalo estaba lleno de los colores patrios, adornado con imágenes del Presidente y carteles de apoyo.
El evento marcó un momento significativo, ya que fue el primer Presidente de México en décadas, en despedirse sin recibir abucheos o muestras de desaprobación. En su lugar, la multitud expresó su cariño con carteles y gritos de admiración, como uno que decía: “Te robaste millones de corazones”. Para muchos, este fue un momento histórico, ya que López Obrador ha forjado una conexión única con el pueblo mexicano durante su mandato.
La ceremonia incluyó 24 arengas que honraban a los héroes de la Independencia, como Miguel Hidalgo, Josefa Ortiz de Domínguez y Vicente Guerrero. También incluyó “mueras” dirigidos a la corrupción, la avaricia, el racismo y la discriminación. Con un “¡Viva la Cuarta Transformación!” y tres “¡Viva México!”, López Obrador concluyó su último Grito de Independencia. Luego, tocó la histórica campana de Dolores y el Himno Nacional resonó en la plaza.
Después del protocolo, el Presidente regresó al balcón para disfrutar del espectáculo de fuegos artificiales junto a su familia, la presidenta electa Claudia Sheinbaum, su gabinete e invitados especiales. Mientras la multitud coreaba “¡Es un honor, estar con Obrador!”, una joven no pudo contener las lágrimas al saber que era la última vez que el presidente López Obrador se dirigía a la nación desde ese balcón.
López Obrador había llegado a la plaza del Zócalo muchas veces en su carrera política, desde su lucha por la democracia en los años noventa hasta su elección como jefe de Gobierno en 2000 y su lucha contra el fraude electoral en 2006. Esta fue su despedida final de ese espacio, que ha sido testigo de muchos momentos clave en su trayectoria.
La celebración estuvo acompañada de la actuación musical de la Banda MS, que hizo bailar a la multitud antes y después de la ceremonia. La lluvia no detuvo a los asistentes, quienes, sin importar las inclemencias del tiempo, permanecieron en el Zócalo coreando canciones y expresando su agradecimiento al Presidente.
Al final del evento, López Obrador se tomó su tiempo para despedirse del pueblo que lo ovacionaba, levantando las manos en señal de adiós. A medida que se retiraba, la multitud comenzó a corear “¡Presidenta, Presidenta!”, en referencia a Claudia Sheinbaum, quien asumirá el cargo tras la conclusión del mandato de López Obrador.