Su legado es significativo, es uno de los instrumentistas más grandes de su país

Redacción

El lunes, La Habana se despidió del destacado trompetista Luis Manuel Mirabal Vázquez, conocido en el ámbito musical como El Guajiro Mirabal, el trompeta de oro del proyecto musical Buena Vista Social Club.
Con 91 años, el artista dejó un legado significativo en la música cubana, siendo reconocido como uno de los más grandes instrumentistas de su país.
Su trayectoria estuvo marcada por su participación en el aclamado Buena Vista Social Club y en diversas orquestas de renombre internacional.
Mirabal nació el 5 de mayo de 1933 en Melena del Sur, actual provincia de Mayabeque. Desde pequeño, su inclinación por la música fue evidente, influenciado por su padre, director de la banda municipal, quien le enseñó a tocar la trompeta.
A la edad de 12 años, ya formaba parte de la banda, marcando el inicio de una carrera que se consolidaría en 1951. Tras la revolución de 1959, se unió a la Banda de Música de Marianao, donde continuó desarrollando su talento. Fue miembro de la orquesta Riverside y del Conjunto Rumbahabana. También fue uno de los fundadores de la orquesta del cabaret Tropicana, así como de la del cabaret Parisién y del Hotel Nacional de Cuba.
Su apodo, El Guajiro, se lo otorgó el músico venezolano Óscar de León, quien tuvo el privilegio de contar con Mirabal en sus presentaciones en la Isla. Además, compartió escenario con Arturo Sandoval, otro destacado trompetista cubano, como parte de la Orquesta de Música Cubana Moderna.
A lo largo de su carrera, Mirabal obtuvo numerosos reconocimientos. En 1998, recibió un Grammy Latino junto al Buena Vista Social Club, y en 2005, su disco Buena Vista Social Club presenta Manuel Guajiro Mirabal fue nominado al Grammy. Al año siguiente, también recibió una nominación a los premios Billboard de la música latina. Su participación en la película dirigida por el cineasta alemán Wim Wenders en 1999 sobre el Buena Vista Social Club consolidó aún más su popularidad.