Nosotros solo queremos transporte público y seguridad: ciudadanos

Dassaev Téllez

Habitantes de las colonias ubicadas al sur de Chilpancingo y que son unión entre la capital del estado y la localidad de Petaquillas, continúan a la espera de que el transporte público para sus colonias se reactive, luego de que se suspendiera el servicio por la jornada de violencia que se vivió a principios de mes y que dejó un saldo de diversas unidades quemadas y personas           asesinadas.

En algunos casos, tienen que caminar más de un kilómetro para poder encontrar una urban que los lleve al centro o al Mercado de Chilpancingo.

Luego de los hechos violentos que se suscitaron en la ciudad de Chilpancingo, todas las rutas de las colonias que están en los límites de la capital y de la localidad de Petaquillas pararon sus rutas y dejaron de prestar servicio, así como de la misma manera, el servicio de taxis anunció que lo más al sur que llegarían en Chilpancingo, sería el punto conocido como Parador del Marqués.

Pero, a pesar de que poco a poco, la normalidad fue regresando a la ciudad y que las rutas del Circuito Río Azul comenzaron a circular por este tramo que se conoce como bulevar Chilpancingo-Petaquillas.

Las rutas de las colonias de esa zona, como lo son Mirna Acevedo, Real del Valle 1 y 2, Villas Vicente Guerrero, La Cinca, Emperador Cuauhtémoc, Viudas de Huautla, Valle Esmeralda y Río Azul 1 y 2, no lo hicieron de la misma manera.

El alego de los transportistas, con justa razón, es de que la amenaza de entrar a la zona de Petaquillas era el arriesgarse a que les quitaran y quemaran las unidades, “la amenaza no la han quitado, el gobierno no ha dicho si también a nosotros nos van proteger, porque a los de esa zona ya les garantizaron su seguridad y a nosotros ¿Quién nos va a cuidar?”, indicó uno de los transportistas.

A pesar de que algunas de estas rutas han comenzado a circular, siendo las que evitan llegar hasta la entrada de Petaquillas, otras, optaron por no llegar a sus destinos, dejando a los ciudadanos en el punto conocido como el retorno de la Cinca, donde se ha instalado un retén y se encuentra la base de la Guardia Nacional, de ahí, los usuarios tienen que caminar hasta sus hogares, en algunos casos hasta casi kilómetro y medio de distancia.

Por esta razón, los habitantes de estas colonias han comenzado a enviar escritos a la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero para solicitarle la seguridad de los transportistas y evitar seguir exponiéndose más a los asaltos, dado que algunos habitantes, principalmente jóvenes estudiantes, salen de sus hogares desde las 6 de la mañana o regresan hasta casi las 9 de la noche y caminan en zonas poco iluminadas.

Señalando que en caso de no tener respuesta a su petición por escrito, podrían iniciar una serie de movilizaciones para ser escuchados, “muchos lo hacen y los atienden, nosotros solo queremos transporte público y la seguridad de los transportistas”.