Andreas Brehme, autor del gol de penal que le dio a Alemania Occidental el título en el Mundial de 1990 al vencer en la final a la Argentina de Diego Maradona, falleció ayer martes a los 63 años.

La pareja del ex futbolista, Susanne Schaefer, confirmó su deceso en un comunicado enviado en el que explicó que Brehme murió “repentinamente” durante la noche del lunes tras sufrir un paro cardiaco.

“Uno de los futbolistas más grandes de la historia de Alemania. El futbol alemán le debe mucho”, dijo el presidente de la Federación Alemana de Futbol, Bernd Neuendorf.

Varios ex compañeros y otras personalidades internacionales rindieron tributo al jugador que cariñosamente era conocido como Andi Brehme, uno de los más destacados en las décadas de 1980 y 1990.

“El FC Bayern está profundamente conmocionado por la repentina muerte de Andreas Brehme”, dijo el club en un comunicado.

“Siempre llevaremos a Andreas Brehme en el corazón. Como campeón del mundo y como una persona muy especial”, añadió la entidad bávara, donde Brehme jugó dos temporadas a mediados de los años 1980 (1986-1988).

Aunque el club no precisó la causa de su muerte, la prensa alemana informó que Brehme falleció como consecuencia de un paro cardiaco en la madrugada del martes en Múnich.

Brehme entró en la historia del futbol alemán al lograr único tanto en la final mundialista contra la Argentina de Maradona disputada el 8 de julio de 1990 en el Estadio Olímpico de Roma.

Un capítulo de la historia del futbol germano como antes lo había protagonizado Gerd Müller en la final del Mundial de Alemania-1974 (2-1 a Países Bajos) o más recientemente Mario Götze en Brasil-2014, también contra Argentina (1-0).

“No importa dónde esté, en un aeropuerto o de compras, siempre me preguntan por aquello”, recordó Brehme en una entrevista a la agencia alemana SID, filial de la AFP.

Sus dos mayores clubes fueron el Bayern Munich (1986-1988), con el que ganó la Bundesliga en 1987, y el Inter de Milán (1988-1992), donde ganó la Serie A en 1989 y la Copa de la UEFA en 1991.

“Ciao Andy, leyenda eterna. Un magnífico jugador y un verdadero interista”, escribió en X el Inter, donde coincidió con sus compatriotas Jürgen Klinsmann y Lothar Matthaeus, en una época en la que el otro gran equipo de la ciudad lombarda, el AC Milan, tenía como estrellas a los neerlandeses Ruud Gullit, Marco Van Basten y Frank Rijkaard.

El club nerazzurri anunció que sus jugadores lucirán un brazalete negro en señal de luto en el partido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones que el Inter jugará este martes contra el Atlético de Madrid en el Giuseppe Meazza.

Tras dejar Italia, Brehme jugó incluso en España, una temporada (1992-1993) en el Real Zaragoza, pero sin demasiada suerte y regresó a su país.