Antonio Hernández

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado una emergencia de salud pública de importancia internacional, su nivel de alerta más alto, debido al brote de mpox (anteriormente conocido como viruela del mono o símica) en África. Este brote se originó en la República Democrática del Congo (RDC) y es causado por una nueva cepa más grave y letal.
La decisión fue tomada tras una reunión de ayer miércoles en la que participaron 16 expertos del Comité de Emergencia de la OMS. “Hoy, el comité de emergencia me confirmó y notificó que, en su opinión, la situación constituye una emergencia de salud pública de preocupación internacional. He aceptado esa recomendación”, declaró Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, en una conferencia de prensa posterior a la reunión.

Tedros también expresó su preocupación por la rápida propagación del brote de mpox en el occidente de la RDC, su detección en países vecinos que no habían reportado casos previamente, y el riesgo de una mayor propagación en África y en otras regiones.
Hasta la fecha, el número de casos ha superado el total del año anterior, con más de 14 mil diagnósticos y 524 muertes, según explicó el director general de la OMS durante la reunión, que duró más de cinco horas a pesar de haber comenzado a las 12 del mediodía.

El martes, el Centro para el Control de Enfermedades de África también declaró una emergencia sanitaria en todo el continente debido a la enfermedad.
La aparición de esta nueva variante en 2023 en la RDC y su rápida propagación, principalmente a través de la transmisión sexual, junto con su detección en países vecinos, ha sido motivo de especial preocupación para la OMS. En el último mes, se han reportado cerca de 90 casos de esta cepa en cuatro países vecinos de la RDC que no habían registrado previamente casos de mpox: Burundi, Kenia, Ruanda y Uganda.

En 2022, la OMS ya había declarado una emergencia sanitaria mundial por un brote de mpox, una enfermedad endémica en África que se había extendido a decenas de países.
En cuanto a Europa, a finales de julio, el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) evaluó el riesgo de que esta nueva cepa llegase al continente como “muy bajo”.

“El riesgo para la población de la UE y el EEE derivado de la nueva variante de mpox detectada en la RDC sigue siendo muy bajo. El ECDC está trabajando con nuestros socios en África para contener este brote, evitar la propagación de la nueva variante y fortalecer las capacidades futuras de preparación y respuesta”, señaló Pamela Rendi-Wagner, directora del ECDC.