Califica el presidente de Colombia la detención de Otoniel como el golpe más duro al narcotráfico
En una operación conjunta del Ejército, la Fuerza Aérea y la Policía, denominada Osiris, las autoridades colombianas capturaron a Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, considerado como el narcotraficante más buscado de Colombia y jefe máximo del llamado Clan del Golfo.
La captura ocurrió en Necoclí, en la región de Antioquía, cerca de la frontera con Panamá.
El presidente de Colombia, Iván Duque, confirmó la detención de Úsuga y la calificó como “el golpe más duro que se le ha propinado al narcotráfico en este siglo en nuestro país”.
Estados Unidos ofrecía por él una recompensa de 5 millones de dólares y este sábado fue detenido.
“Este golpe es solamente comparable con la caída de Pablo Escobar en los años 90”, agregó.
“Alias Otoniel era el narcotraficante más temido en todo el mundo, asesino de policías, soldados, líderes sociales, reclutador de menores”, dijo también Duque.
“Se conoce también por esa demencia que lo llevó a abusar de manera recurrente de niños, niñas y adolescentes. No solamente estaba en el cartel de los más buscados por narcotráfico, sino también por abuso de menores”, detalló el presidente.
“Con este golpe se marca el final del Clan del Golfo”, aseguró.
La “mayor amenaza” en Colombia
Según la prensa colombiana, contra Úsuga hay una circular roja emitida por Interpol por homicidio múltiple, secuestro múltiple y concierto para delinquir, entre otros delitos. Además, es objeto de más de 120 procesos judiciales abiertos por todo tipo de delitos.
De acuerdo con las autoridades, el Clan del Golfo envía toneladas de cocaína hacia Centroamérica y Estados Unidos.
Elizabeth García